APRENDER VIAJANDO. SIN FRONTERAS, de Gustavo Cuervo
"Al descansar mi molido cuerpo entre las sábanas de aquel confortable hotel salteño, mi último pensamiento consciente fue que viajar enseña. Enseña, entre otras muchas cosas, a no juzgar con regla fija. Lo que en un lado es blanco, en otro puede ser negro. Al igual que el blanco radiante del Salar de Uyuni se podía convertir en una negra cárcel de oscuro futuro, nuestras creencias nos convierten en prisioneros, amarrandonos con las cuerdas de nuestros propios valores"
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