EL ALBUM RUSO, de Michael Ignatieff
Si hace un tiempo lei un libro soviético, titulado Una saga moscovita, que era ficción básicamente con hechos históricos desde poco antes de la revolución rusa hasta la muerte de Stalin., hoy traigo lo que podría llamarse con autentica propiedad Una saga rusa que abarca desde mediados del siglo XIX hasta la caída del Imperio Soviético. El marco es amplio, pero es que la historia de la familia de Michael Ignatieff es real, contada en 220 paginas solamente y ante todo, contada desde la experiencia vivida de sus padres y abuelos y desde el corazón.
Por aquí pasan gente insigne al servicio directo del zar, nobles hacendados en linea sucesoria desde Kutuzov (si, el famoso general de Guerra y Paz), gente que firmo tratados fronterizos y comerciales con potencias occidentales o con China, fundadores de la temible Ojrana (antecesora de la KGB), o ministros del ultimo zar con una orientación hacia la monarquía parlamentaria como la británica. Incluso sale de pasada el padre de Vladimir Nabokov, otro caso parecido. Pero no es un libro de historia, ni de política aunque se cuente lo que hubo en juego en esos temas porque esa familia fue protagonista a su manera y, al serlo, lo perdió todo. Se cuenta cómo lo perdió, cómo huyó con suerte de no perder la vida. La vida de los que una vez lo fueron todo en la Rusia zarista y se vieron atrapados por la maquinaria soviética y cómo acabaron. Cómo acabaron sus haciendas heredadas o compradas por sus antepasados: Ignatieff viajó en tres ocasiones, antes y después del comunismo, para ver el lugar de sus antepasados, conocerlos y poder evocar todo lo que le contaron sus padres. Tampoco es un ajuste de cuentas, aunque esta claro que no cree en el comunismo, al menos tal y como lo vivieron sus antepasados y él mismo.
La verdad es que es un libro conmovedor por momentos, ágil de leer, agudo en sus ideas desde las primeras paginas a raíz de lo que significaban antes las fotos, los álbumes familiares. Ignatieff va a lo esencial, la parte que le toca de la historia ya que su conocimiento de los hechos de la época es parcial y no lo esconde, no se pierde en lamentos, sigue el rastro muy de cerca de esa familia que vivía como los reyes y que acabó en la típica diáspora de los rusos años 20, buscando donde echar raíces de alguna forma, ayudando a los compatriotas mas desesperados, teniendo que trabajar mas como obreros que como jefes de empresas y terratenientes de rancias y acaudaladas familias que una vez fueron. Al final, el que fuera ministro de educación del zar esta enterrado en tierra canadiense, mas bien pobre, sus hijos habiendo pasado por diversos trabajos y destinos, y su nieto, el que escribe este libro, siendo profesor de las universidades de Harvard, Oxford, Cambridge y Toronto y diplomático de carrera, político y periodista, todo ello de renombre. Y un buen escritor. Una historia de superación que merece otro libro.El valor mas singular que le doy al libro es el conocer esa versión de los hechos que menos nos ha llegado. Indispensable para que cada uno se haga su propia idea, una idea que no responda a las ideologias del todo blanco o todo negro.
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