UN MES EN SIENA, de Hisham Matar
Una experiencia contada de forma agradecida y personal de una ciudad antigua, renacentista, de la Toscana, que nos muestra con todo su legado arquitectónico, urbanístico y pictórico. El tema es el poder curativo de la cultura. Él parte, según cuenta, de una necesidad vital de sobrellevar la desaparición forzosa de su padre en Egipto, secuestrado por orden de Gadafi. A partir de ahí nos descubre revelaciones al calor de la arquitectura de la parte noble de la ciudad de Siena, de sus pinturas y algunas otras cosas que el nos interpreta a su manera. Nos cuenta como todo eso le hace ver la vida con una perspectiva de mejores posibilidades. Cabe destacar que el flujo de ideas es ameno y fácil de seguir, no es una impostura ni una concatenación de verdades reveladas a golpe de narcisismo ni pedantería; no se ve la cultura renacentista como algo pedante o reservado a unos pocos. Se trata aquí de comentar pinturas de la escuela de Siena y sus paseos por la ciudad a lo largo de un mes, muy sintetizado. Es un libro corto.
Así como hay un hecho que marca al autor, como es la desaparición del padre, en el mundo hay un antes y un después cifrado en año 1348, con la llegada la peste negra a Europa y su rápida extensión, de manera que los siguientes sucesos epidemicos de la misma alcanzaron hasta mediados del siglo XVIII. En la escuela de Siena, en sus pinturas, la llegada supuso el retorno del mal gobierno, una especie de sálvese quien pueda en esta sociedad, un mirar hacia delante constante sin echar la vista atrás a lo bueno que iban perdiendo: eso es lo que reflejaron sus cuadros, ese cambio. Un "comamos y bebamos que mañana moriremos". Un despertar a la culpabilidad por lo que iban haciendo mal, como si fuera inevitable. Sin que sea del todo igual, a ratos pensaba en cómo va cambiando también nuestra forma de pensar actual y, lo que es más importante, nuestro estado de ánimo, con las noticias del cambio climático, la crisis energética y la guerra de Ucrania una vez acabada la pandemia del COVID-19. Un pesimismo gradual.
En Siena se pasó de un gobierno laico, que es lo que reflejan los trabajos de la escuela pictórica, a un gobierno con eminente influencia eclesial. Dicho de otra manera, lo que era admirable de aquel tiempo, la confianza en las posibilidades del hombre, ya en 1354 se vino abajo tras el impacto de la primera embestida de la peste negra. El hecho lo refleja el autor en el paso de comentar las obras de Lorenzetti a las obras de Tadeo di Bartolo.
También nos muestra otra forma de ser árabe en el mundo, una que no es una posibilidad, sino una que ya existe pero que se nos muestra poco: afable, sensible, culto, atento a las personas de la calle, a la cultura, a las tendencias, a los detalles. Vamos, lo que podríamos aprender también más al norte. Es un hombre con su pasado como cualquier otro.
UN MES EN SIENA, de Hisham Matar, del año 2019, unas 150 paginas, en la coleccion de narrativa Salamandra de Penguin Random House
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